El argentino y su cuerpo técnico seguirán formando parte de la estructura del equipo rojiblanco dos temporadas más. Los 7 títulos conquistados hasta el momento y el gran rendimiento de los jugadores, claves para el buen entendimiento entre las partes.
En el día de los Enamorados, 14 de febrero, el Atlético de Madrid trajo un gran regalo a todos sus aficionados. Su entrenador, el argentino Diego Pablo Simeone, ha confirmado su continuidad hasta el año 2022, siendo una de los acontecimientos más importantes de los últimos tiempos, y que sirve para reforzar la moral tanto de los jugadores como de los aficionados, que necesitan un líder para seguir peleando.
En su octava temporada desde que se hiciera cargo del equipo de la capital de España, Simeone consigue 7 títulos, siendo el entrenador más laureado de la historia del Atlético de Madrid. La Liga 2013/14, varias Europa League y Supercopas de Europa, además de un entorchado en la Copa del Rey y en la Supercopa de España adornan el palmarés de un hombre que ha cambiado la historia de los colchoneros para siempre.
Simeone, el salvador esperado
Desde que entrara en las oficinas del Vicente Calderón por primera vez como preparador del Atlético, allá por 2012, Simeone aportó liderazgo, temple, guerra, coraje, y sobre todo corazón para un equipo que en esos momentos estaba en lo más bajo, rozando el descenso en Liga y eliminado de la Copa del Rey. Sin embargo, este tipo de retos son los que apasionan al ex-jugador de Atlético y Sevilla entre otros equipos.
Ese mismo año, logró meter al equipo en Europa una temporada más y consiguió un triunfo de prestigio. La final de la UEFA Europa League ante el Athletic de Bilbao en Bucarest, y con un contundente resultado, por 3-0, dieron a la familia rojiblanca motivos para volver a ilusionarse y seguir apoyando más que nunca a un conjunto que ya estaba dando muestras de lo que estaba por llegar en las temporadas venideras, de la mano de su entrenador.
Un equipo sin límites
La manera de competir, con una alta intensidad y una forma de presionar y correr hasta el final es lo que caracteriza al Atlético del Cholo. El técnico siempre ha dejado claro que quiere 11 guerreros sobre el terreno de juego y es lo que ha ido teniendo a lo largo de los años, siendo el entrenador con más temporadas consecutivas en Primera de los 20 que componen la máxima categoría del fútbol español. Todo un récord a la altura de Simeone.
Sin embargo, en su trayectoria en Madrid hay claroscuros. No solo hay triunfos en la brillante etapa de Simeone. Las dos finales de Champions perdidas, primero en Lisboa y después en Milán, frente al eterno rival, el Real Madrid, pesan mucho. Y es en la segunda, cuando Simeone tuvo dudas, cuando pensó en dejar al equipo. Sin embargo, el pensamiento no le duró mucho e inmediatamente volvió a ponerse al frente de una escuadra que nunca deja de creer y que no tiene límites.
Un entrenador en constante evolución
Una de las principales virtudes de Simeone es su constante evolución, su obsesión por mejorar en todos los detalles. Una obsesión que no siempre se entendió, pero su núcleo duro (cuerpo técnico y jugadores) sí lo hicieron y es por eso que el entrenador va a cumplir, en cuanto llegue a 2022 su contrato, una década como entrenador del Atlético de Madrid.
Todo un logro, más teniendo en cuenta la escasa duración que tienen los entrenadores en equipos de élite hoy en día. Es un símbolo de lo que ha conseguido Simeone, que cambió de casa, del Manzanares a la M-30, del Vicente Calderón al Metropolitano, junto a todos los atléticos, en definitiva los suyos, que van con él hasta el final y hasta donde tengan que llegar.
Concluyendo, la renovación de Simeone supone la renovación del ciclo más glorioso de la historia del Atlético de Madrid, que se asegura de esta manera, tener a su faro y guía durante al menos tres años más.
