Artículo de opinión sobre el inicio de año del Real Madrid de Baloncesto
Los chicos de Pablo Laso no han comenzado el año 2020 de la forma más deseada. La increíble racha de victorias que cosecharon durante la primera mitad de temporada comenzó a verse amenazada tras el Clásico en el que se vio vapuleado por el Barça de Pesic.
Sin embargo, los resultados han comenzado a darle la espalda. La competencia también muestra su nivel y equipos como Bilbao Básket o Baskonia en el Campeonato doméstico y el Analodu Efes durante el día de ayer en Euroliga retratan esta tendencia.
Profundizando con mayor precisión en la situación actual del equipo, el encuentro de ayer ante Analodu Efes retrata su estado de forma.
La tensión competitiva se hace evidente, sobre todo la intensidad defensiva impregnada por el incombustible Pablo Laso durante los tiempos muertos.
Fuente: Twitter oficial del Real Madrid
Sin embargo, la falta de precisión en los instantes finales está provocando que se escapen puntos durante fases decisivas de los encuentros.
Puede tratarse de problemas que atañen a los nervios durante momentos decisivos. No es el primer ni será el único combinado que le ocurra.
Cabe recordar como la Selección Española perdió la final del Eurobasket 2007 en los instantes finales por falta de acierto debido a una mayor ansiedad al verse con la copa en la mano delante de su afición.
Misma suerte corrieron los blancos que su anotación se vio descafeinada en los instantes finales, circunstancia que refleja un 75-80 final.
Preocupa la falta de acierto en momentos decisivos, pero no debe ser un aliciente para que salten todas las alarmas. Además, el rendimiento en la fase regular no resultará decisivo para la consecución de los títulos propuestos.
Sin embargo, las carencias deben empezar a pulirse para llegar a la excelencia competitiva en la fase decisiva de la temporada. Al fin y al cabo, se juega como se entrena y Pablo Laso tiene el reto de seguir manteniendo la motivación de veteranos y noveles.
El encuentro de hoy ante Maxi Manresa es una oportunidad de oro para volver a saborear un triunfo y adquirir la autoestima necesaria antes de la esperada Copa del Rey en Málaga.
