El jugador del Getafe permanece en la comisaría de Albacete a la espera de tomar declaración. Desde el club azulón todavía no se han pronunciado.
Mathías Olivera fue detenido en la madrugada del sábado al domingo tras un incidente en Albacete. El jugador azulón viajó hasta la ciudad manchega tras ver jugar a su equipo en el Coliseum contra el Alavés. Según cuenta el Digital de Albacete, el defensa se vio involucrado en una trifulca que acabó con la detención del azulón por un presunto delito de atentado contra agentes de la autoridad. La policía trasladó inmediatamente al jugador urugayo a la Comisaría de la Policía Nacional en Albacete. Es allí donde pasó la noche y donde se le tomará declaración a lo largo del día de hoy. Desde el Getafe quedan a la espera de que se aclaren los hechos para tomar medidas contra el jugador.
Olivera suele viajar a Albacete en los días de descanso. Getafe y Albacete están separadas por dos horas en coche, lo que hace que los desplazamientos del lateral sean habituales. Allí jugó los primeros meses de la temporada pasada, cedido por el Getafe. Su integración en el club fue tal que el uruguayo dejó grandes amistades. En el mercado invernal, el jugador volvió al Coliseum para ayudar al equipo tras las numerosas bajas que se sucedieron en la plantilla.
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En lo futbolístico, Mathías Olivera no pasa tampoco por su mejor momento. Bordalás no lo ha convocado en ninguno de los tres encuentros que el Getafe ha disputado. Además, la directiva ha reforzado su posición con los fichajes de Cucurella y Raúl Carnero. Sin embargo, el uruguayo fue pieza clave en el logro de la clasificación europea. Con la grave lesión de Antunes, Olivera asumió galones y rindió enormemente supliendo la baja de un jugador tan importante como el portugués. Su agente y el propio jugador han buscado una salida en este mercado veraniego, pero todo parece indicar que el ex del Albacete se quedará en el Getafe.
