El juego del Levante no acaba de convencer a la afición, pero sus 26 puntos le dan un espejismo de tranquilidad en la tabla de clasificación.
Si el pasado año le dijesen a la afición del Levante que en la actual temporada acabarían la primera vuelta con 26 puntos nadie se lo creería. Los granotas han pasado de sufrir por la permanencia a posicionarse a más puntos del descenso que de Europa. Una situación muy sorprendente y que se ha visto reflejada en victorias esenciales y partidos épicos, pero ¿se puede estar satisfecho hasta el momento?
Por una parte, rotundamente SÍ. El conjunto blaugrana ha firmado una de sus mejores primeras vueltas en La Liga, consiguiendo esos 26 puntos que saben a más de media permanencia. Los números alcanzados nos hacen recordar a las míticas campañas del Eurolevante, ya que llegaron a navidades con una puntuación similar (30 puntos).
Otro dato que alimenta la fe en llegar a un gran puesto en la competición nacional es la gran plantilla que tienen los valencianos. Y es que entre sus filas cuentan con nombres como Morales, capitán e ídolo granota; Roger Martí, que comparte con Ángel el registro de máximo goleador de La Liga; o José Campaña, estrella nacional al que equipos como el Sevilla han tenido en sus agendas.
Todo ello sería la fórmula perfecta para conseguir un equipo que debe luchar por algo más que la permanencia, pero parece que no será el caso. El juego del Levante tiene grandes carencias que han provocado que se deje muchos puntos a lo largo de las jornadas. La afición nota este defecto y nota como este problema puede derivar en futuros sustos.
NO ES ORO TODO LO QUE RELUCE
Pese al colchón de puntos sobre los puestos de descenso (9), el calendario no acompaña al conjunto azulgrana. Barcelona, Leganés, Villarreal y Real Madrid son sus próximos rivales y, con resultados catastróficos, puede verse en un aprieto. Si a ello le sumas la nula incorporación de refuerzos, además los descartes habituales de Paco López, la plantilla se queda corta de cara a la recta final de la temporada.
También se debe exaltar a la defensa. La nula fiabilidad, los errores clamorosos, la falta de orden y la poca contundencia han condenado al Levante en diversas ocasiones. Esto ha derivado en que el equipo sea uno de los más goleados en la competición. La representación de estos problemas se vio en la dolorosa derrota frente al Valencia en el derbi. A todo lo anterior se debe sumar los bajos niveles de jugadores clave en el equipo como Campaña, Morales o Roger, la fórmula exitosa comienza a flaquear.
El Levante lleva una racha de 3 partidos consecutivos perdiendo y el domingo se enfrentan al Barcelona, actual segundo clasificado, y en el Camp Nou. No se puede mejorar el momento para retomar el vuelo y sacar la mejor versión de todos en el día del partido número 500 en primera división. El momento para dar un golpe sobre la mesa y disipar todas las dudas. La gesta es difícil, pero con un mejor juego y darlo todo en el verde, sus aficionados estarían más que satisfechos.