La tranquilidad ha vuelto a las gradas del Metropolitano. Las claves han sido la liberación de Lemar en la mediapunta y la nueva posición de Ángel Correa.
El Atlético de Madrid ha pasado por una mala racha en los últimos partidos, el mal juego y los malos resultados habían generado un ambiente extraño en el feudo rojiblanco. Pero el equipo se ha desquitado en el último encuentro ante el Athletic Club, un partido redondo, dominado de principio a fin y sin la incertidumbre de un resultado corto en los minutos finales.
Quién desatascó el partido fue Correa, aunque el gol lo acabó anotando Saúl, el argentino fue el que realizó una jugada magistral para meterse en el área y asistir. Esta nueva posición de Correa más adelantada y libre de un esfuerzo defensivo en banda, le hace ser más peligroso. La habilidad que tiene para girarse le da mayor importancia cuanto más cerca del área rival se encuentra.
Lemar como generador de juego
Otro de los puntos de mejora del conjunto madrileño, fue la libertad ofensiva de Lemar. Es verdad que en fase defensiva seguía teniendo la responsabilidad de trabajar para el equipo en banda. Pero en el ataque rojiblanco tenía total libertad para desplegarse por el frente de ataque y asociarse mejor con sus compañeros.
Esa asociación se veía reflejada en las combinaciones en banda izquierda con Renan Lodi, provocando así transiciones ofensivas rápidas. El equipo de Simeone combina mejor cuando Lemar está fino, dota al equipo de mayor velocidad en las combinaciones y de mayor posibilidad de peligro. Si continúa en esa línea, el francés puede convertirse en uno de los jugadores más importantes para el argentino.
La seguridad de Koke
Otro de los discutidos en los últimos días ha sido el capitán, un jugador que siempre lo da todo pero que no estaba pasando una buena racha en cuanto a precisión. Contra el Athletic mejoró, ya que jugó en una posición más cercana a Thomas, una posición de más control y seguridad. En esta posición el vallecano es fundamental, por su capacidad de asegurar la posesión y de lanzar contragolpes.
La fuerza de la novedad
Lo más destacado del Atlético de Madrid es su sistema defensivo, aún más el que jugó contra el Athletic en la última jornada de liga. Se trata de una defensa totalmente nueva con respecto al año anterior (por las lesiones), pero parecen haberse adaptado genial. No concedieron apenas peligro y el poco peligro que concedieron fue disipado por el de siempre, Jan Oblak.