El Real Madrid se impuso con mucha superioridad por 4-1 al Al Ain de Abu Dhabi para conseguir el cuarto Mundial de Clubes de su historia, torneo al que solo tiene acceso el campeón de cada continente. Un equipo blanco que ha acompañado su tercera Champions consecutiva con tres entorchados mundialistas; cuatro en los últimos cinco años.
El inicio de partido pronto hizo presagiar una goleada del equipo madridista que empezó muy enchufado en ataque con una ocasión de Lucas Vázquez al palo en el minuto 4. Sin embargo, el equipo asiático que empezó el encuentro con valentía tuvo su mejor ocasión en el minuto 12 tras un error gravísimo de Marcelo. El Shatat remató ante un Courtois batido, pero emergió la figura del capitán Sergio Ramos para desviar ese balón bajo palos.
Y como equipo grande que es el Real Madrid, se repuso de este susto de la mejor forma posible, golpeando más fuerte a su rival. Justo en la jugada siguiente, Benzema recibió un balón en la frontal del área que dejó con mucha calidad al croata Luka Modric, flamante balón de oro, para que con un zurdazo muy estético adelantara 1-0 al equipo blanco.
A partir de ese momento el Real Madrid, con la tranquilidad de verse por delante en el electrónico, gozó de numerosas ocasiones para ampliar su ventaja, pero hoy no era el día de sus delanteros Benzema y Bale que, añadido al acierto del meta Khalid, perdonaron varias veces el 2-0. Así, se llegó con este corto resultado de 1-0 al descanso.
En la segunda mitad, los blancos siguieron mostrando sus credenciales en ataque, y esta insistencia al final acabó dando sus frutos. Marcos Llorente, que estaba siendo el mejor jugador del partido, anotó su primer tanto con la camiseta merengue, un auténtico golazo de volea en el minuto 60 desde más allá de la frontal del área, que el portero solo pudo seguir con su mirada como se colaba en la portería.
Con el 2-0 tuvo Al Ain su segunda mejor ocasión del partido para poder recortar distancias, pero esta vez se topó con Courtois, un portero que cada vez está justificando más su fichaje por el Madrid, haciendo olvidar cada vez más la figura del gran Keylor, sostén importante del equipo en los últimos años.
Poco después llegaría la sentencia en el minuto 79 con el 3-0, obra de Sergio Ramos. Centro de córner dirigido por Modric que cabeceó en carrera el camero, que además mandó callar al público que le había pitado durante todo el encuentro, quien sabe si por el lance que tuvo con Salah en la final de la Champions del pasado mes de mayo en Kiev o por haber ido vestido con el traje local a una mezquita de la ciudad árabe.
Ya en los minutos finales pudimos ver otros dos goles; primero, el gol del honor para el Al Ain anotado por el japonés Shiotani tras un excelente cabezazo, y después el 4-1 en una jugada marca de la casa del brasileño Vinicius, que entró en los últimos minutos y cuyo disparo tras un rechace en un defensa redondeó el marcador para el equipo de Solari.
