El Atlético de Madrid empieza a cerrar su plantilla para una temporada que se presenta emocionante
Las salidas de Antoine Griezmann al FC Barcelona (que sigue dando que hablar), Diego Godín al Inter de Milán, Lucas Hernández al Bayern, Rodrigo al Manchester City, o Juanfran al Sao Paulo se han solventado con fichajes de alto nivel que además han saneado la economía del club.
Con el dinero del ariete francés se fichó a Joao Félix, una de las mayores promesas del futbol europeo a sus diecinueve años; con los ochenta millones de Lucas se reestructuró la defensa por completo (Lodi, Hermoso, Felipe y Trippier), a los que se suman Marcos Llorente, Hector Herrera y el croata Saponjic con el traspaso de Rodrigo al conjunto de Guardiola. Además, el Atlético presenta un superávit de cerca de 60 millones, lo que permitiría afrontar un nuevo fichaje de altura.
Pese a que las cuentas salen, Berta y Gil Marín siguen dándole vueltas a dos salidas que pondrían en marcha la guinda a un mercado histórico para la entidad colchonera: un ’10’ de garantías. Para lograrlo, hay dos nombres sobre la mesa.
El primero de ellos es el del argentino Ángel Correa. El eterno revulsivo de Simeone, que nunca consiguió estabilidad en el once. Sería injusto, sin embargo, no reconocer su influencia en el juego, siendo decisivo en muchos encuentros que se le atascaban al equipo. Su mala toma de decisiones al terminar jugadas y su irregularidad son los principales motivos por los que el Atlético decide prescindir de él pese a que el ‘Cholo’ estaría encantado de que siguiera en la plantilla. El argentino tiene un buen cartel en Europa, y todo apunta a que podría recalar en el Milán por algo más de cuarenta millones.

Fuente: Twitter de Ángel Correa
El otro jugador con pie y medio fuera del equipo es Nico Kalinic. El croata, pese a que tiene más que asumido su rol de tercer delantero, no cuenta para Simeone. El fichaje de Saponjic y la irrupción de canteranos como Camello o Garcés le quitan todas las posibilidades de contar con minutos en la nueva temporada. Con peor cartel que Correa y con un salario difícil de asumir por la mayoría de clubes interesados, su destino sigue sin estar definido.

Fuente: Twitter de Nicola Kalinic
Con el dinero ahorrado y con el que sacarían de estas dos ventas, el Atlético de Madrid tendría en mente un último fichaje, un media punta. Todas las informaciones apuntan al colombiano James Rodríguez. Sin embargo, el Real Madrid se muestra reticente a permitir el traspaso después de vender a Llorente y del sonrojante 7-3 en EEUU. Pese a ello, la necesidad del conjunto blanco de reunir dinero para afrontar el fichaje de Pogba y la ausencia de otros equipos en la puja por James (el Nápoles ofrece una cesión), podrían acercar al cafetero al club rojiblanco.
