Buen nivel el mostrado por los de Montella en el Allianz Arena, pero aun así, insuficiente
A continuación analizaremos uno por uno el rendimiento de los jugadores del Sevilla FC:
David Soria (7): Demostrando por qué se confió en el para esta eliminatoria de tanta enjundia, seguro en las salidas y con un par de paradas de nivel.
Navas (9): De los mejores partidos que se le recuerda desde su retorno, sólido atrás ante un hiperactivo Ribery y un puñal en sus subidas. El mejor del partido.
Mercado (7): Uno de los mayores pecados de Berizzo. Mostró contundencia e inteligencia al ver la amarilla desde muy pronto. No dejó respirar a Lewandowski, que ya es mucho.
Lenglet (8): Contundente cuando tiene que serlo y fino en la salida de balón. Ante uno de los mejores delanteros del mundo no se amilanó y ya demuestra que puede competir al nivel que sea.
Escudero (6): Partido regular, intercalando recuperaciones de mucho mérito con pérdidas muy peligrosas. No se proyectó en ataque como suele hacerlo.
N´zonzi (7): Incansable, no notó la carga de partidos y por momentos dominó el centro del campo junto a Ever. Partido para enmarcar del francés, uno más.
Banega (7): Sin estar al nivel de otros partidos pero aún así se nota cuando está y cuando no, aportó una salida aseada del balón, justo lo que faltó en la ida.
Mudo Vazquez (6): Partido discreto del ítalo-argentino, no aportó último pase en tres cuartos, lo que provocó que el Sevilla andase escaso de profundidad.
Sarabia (5): Desacertado. Con varias claras en sus botas, anduvo desacertado en los controles y muy errático en pases que suele dominar.
Correa (6): Con la más clara en un cabezazo que estrelló en la madera. Acabó expulsado por una entrada a destiempo. Lo intentó durante todo el partido sin acierto.
Ben Yedder (5): Sin incidencia en el encuentro, muy bien tapado por los centrales del Bayern. A penas le llegaron balones.
Muriel (6): Al igual que Ben Yedder, sin mucha incidencia en el juego. Aportó movilidad.
Sandro (7): Pidiendo paso a base de buenas actuaciones y ganas. Revolucionó el partido los minutos que le tocó jugar.