Los Lakers tienen a muchos jóvenes y en ellos hay puestas muchas miradas, en Ingram está una de ellas y muchos se preguntan si llegará a superestrella o no.
Desde que Brandon Ingram llegó a la NBA, muchas miradas han estado puestas en él, y esque ser el número dos del Draft es lo que tiene.
Ingram fue seleccionado por los Lakers en el Draft del 2016, después de jugar una buena temporada en la prestigiosa universidad de Duke; en mi opinión, no era una temporada a nivel de ser elegido en segunda posición, pero los scouts vieron cosas especiales en él.
Como ya sabréis, algo que se hace con los jugadores recién llegados es compararlos con jugadores actuales, y una de las comparaciones más sonadas en Ingram era con Kevin Durant, y es muy cierto, los dos son exteriores altos, delgados, saben driblar y sobretodo, son anotadores. Sin embargo hay una diferencia muy destacable, y es que Durant, desde que llegó se ha estado machacando en el gym para estar a punto. Ingram al contrario, en los dos años que lleva en la liga, yo no le veo que se haya pasado mucho por el gimnasio.
Dejando aparte las comparaciones, Ingram es un jugador con un gran potencial por desarrollar, y hay partidos que vemos destellos de lo que puede llegar a ser, pero como ya todos os habréis dado cuenta, en estos Lakers no va a explotar, la evolución de Ingram a superestrella será en otro equipo, porque con jugadores como LeBron James, Lonzo Ball y Kyle Kuzma al lado no hay hueco para explotar todos, y alguno se tendrá que ir para explotar el mismo y los demás, y a mí parecer ese debería de ser Brandon Ingram.
En el momento que Ingram abandoné Los Ángeles y se vaya a un equipo con necesidad de estrella como por ejemplo los Chicago Bulls, se convertirá en otro jugador, estoy convencido de ello, y por lo tanto, afirmó que en el momento en el que Ingram se vaya de los Lakers se convertirá en una superestrella de la NBA.