El equipo madridista pierde parte de sus opciones tras haber realizo un pésimo ejercicio de intensidad
La pandemia supuso el fin de la Liga Regular, premiando en mayor medida la concentración a corto plazo que la constancia en un largo periodo de tiempo. El Real Madrid ha sido el principal perjudicado de este cambio de perspectiva en la competición.
Este hecho no libra de pecado a un equipo que ha sido la decepción del Campeonato. La guinda a este amargo pastel la ha puesto en el encuentro disputado ante el Morabanc Andorra. Ha caído derrotado por 91-75 en un encuentro para el olvido.
La victoria cosechada días atrás le permitía depender de si mismo para llegar a la semifinal. Nada más lejos de la realidad, los blancos tuvieron un inicio de encuentro paupérrimo. Comenzaron perdiendo con un parcial de 10-0. Este hecho no podía pasar inadvertido en el seno de Pablo Laso, pidiendo tiempo muerto ipso facto.
⛹️♂️ Nuestro equipo pierde y ya no depende de sí mismo para clasificarse.#RMBaloncesto
— Real Madrid Basket (@RMBaloncesto) June 24, 2020
El técnico quería otorgarle mayor responsabilidad a Anthony Randolph o a Facundo Campazzo para que su intensidad permitiera conseguir el equilibrio táctico deseado. Sin embargo, tanto va el cántaro a la fuente, que al final se acaba rompiendo.
No hubo fortuna como en el encuentro anterior ante Valencia Basket. Cuando falta frescura, la defensa se muestra vulnerable y la carencia de fluidez en ataque provoca un exceso de errores de cara al tiro. La ventaja se iba incrementando a doce puntos tras los dos primeros cuartos.
Había halo de esperanza de cara a la segunda parte. El tercer cuarto comenzó con los blancos acortando distancias. Pero se trataba únicamente de un espejismo. El punto de inflexión lo marcó Tyson Pérez. El jugador realizó un tapón sonoro ante Trey Thompkins y posteriormente, anotó seis puntos consecutivos.
En ese momento, el equipo blanco queda al borde del abismo. Deberá buscar aliados en la última jornada. Un triple empate que incluya al Gran Canaria o al Valencia Basket es su única opción. Carambola que podría resucitar a un Real Madrid moribundo que no imaginaba esta situación antes de empezar la fase final de la ACB.