El Atlético, con una soberbia actuación, de principio a fin, derrotó de forma contundente a uno de los favoritos para la Liga de Campeones, la Juventus, que fue inferior durante todo el partido. Godín y Giménez, ambos en los últimos minutos, los autores de los goles rojiblancos que le dan una ventaja clave para el partido de vuelta.
Sobre el césped del Metropolitano, antes de empezar el encuentro entre el Atlético de Madrid y la Juventus, aparecía un tifo que rezaba ‘Esencia y libertad’. Ese lema lo aplicó a la perfección el equipo de Simeone, que anuló desde el minuto 1 hasta el 90 al cuadro encabezado por Cristiano Ronaldo, desaparecido en su vuelta a Madrid, una de las claves de la victoria colchonera en el partido de ida de los octavos de final de la Liga de Campeones.
Los goles de Godín y Giménez pusieron el broche de oro a un encuentro que declaró el argentino en rueda de prensa como “imaginado”, el soñado por el Atlético. Además, el VAR anuló un tanto a Morata, muy activo desde su salida en la segunda parte, y volviendo a causar controversia por una jugada de interpretación, en la que se puede dudar de la falta a Chiellini, que parece que se deja caer en las repeticiones de la jugada.
Un inicio arrollador
El Atlético, consciente de lo que se jugaba en el encuentro ante el equipo turinés, salió de forma arrolladora. En la primera jugada del partido, se reclamó posible penalti sobre Griezmann, que se adelantó a la defensa juventina. Poco después, Diego Costa, que volvía a la titularidad tras dos meses lesionado, recibió una amarilla tonta por moverse en la barrera de una falta a favor de la Juventus, causando que se pierda el encuentro de vuelta en el Juventus Stadium.
Mientras, los jugadores dirigidos por Allegri se mostraron lejos de su nivel habitual en estos primeros minutos. Una falta de Cristiano desde lejos que detuvo Oblak en una gran acción fue la única aproximación de peligro de un equipo que era de los favoritos, y al que todo el mundo dio por ganador en la eliminatoria frente al Atlético de Madrid, que demostró que cuanto peor llegue a un partido, más se crece y mejor rinde sobre el terreno de juego.
En el equipo italiano, la vuelta de Ronaldo fue uno de los alicientes de la ida de octavos. El portugués, que regresaba a Madrid tras marcharse del eterno rival, no estuvo a la altura en ningún momento. Es más, cedió a las provocaciones de la grada con un feo gesto que recordaba las Champions que había ganado a lo largo de su carrera, desatando aún más las iras de la grada rojiblanca.
Una segunda parte de lo más agitada
Ya a la vuelta de los vestuarios, y tras recibir una amarilla Thomas por una dura falta sobre Dybala, y que le hace perderse también el siguiente encuentro, los dos equipos saltaron de nuevo al campo con ganas de estrenar el marcador. La primera gran ocasión de esta segunda parte la tuvo Diego Costa, que apuró al máximo a la defensa rival, atenta pero con demasiados errores a lo largo del partido.
Tras una rápida recuperación, el internacional español se plantó solo ante Szczseny con la leve oposición de un defensa juventino. A pesar del gran mano a mano que tenía ante sí, Costa no fue capaz de marcar y mandó la pelota fuera, en un inexplicable final de la jugada, ya que el remate fue muy malo para lo que pudo haber supuesto, tanto para los jugadores del Atlético, como para la afición, que convirtió el Metropolitano en una olla a presión.
Simeone, que quería dar aire a su equipo, ya que puso en el 11 a Koke y Costa, que llevaban mucho tiempo sin jugar, les cambió para dar entrada a Morata y Correa. Dos cambios acertados, que sumados a la llegada de Lemar, agitaron el partido para el Atlético, que ya estaba empezando a notar síntomas de cansancio, algo que estaba explotando a la perfección la escuadra italiana.
En el ecuador de la segunda parte, tras un centro de Filipe Luis, Morata remató a gol, batiendo al guardameta visitante y poniendo el 1-0, hasta que entró el VAR. El colegiado del partido, tras apreciar que el delantero madrileño cometió falta sobre Chiellini, anuló el tanto y devolvió la igualdad al marcador en la jugada más polémica de todo el partido, en una actuación brillante del cuerpo arbitral a lo largo de los 90 minutos.
Finalmente, en el minuto 78, Giménez inauguró el marcador tras aprovechar un pequeño barullo en el área y puso por delante a un equipo que estaba haciendo méritos para liderar en el choque. A los 5 minutos, su compañero en la zaga colchonera, Diego Godín, puso el segundo y definitivo tanto del partido para cerrar una noche mágica en el Metropolitano y confirmar la mejor versión de un Atlético, que se va al partido de vuelta con una ventaja muy importante.
FICHA TÉCNICA
ATLÉTICO 2 – 0 JUVENTUS
Atlético de Madrid: Oblak; Juanfran, Giménez, Godín, Filipe Luis; Koke (Correa, 67’), Thomas (Lemar, 61’), Rodrigo, Saúl; Diego Costa (Morata, 58’) y Griezmann.
Juventus: Szczesny; Di Sciglio, Bonucci, Chiellini, Alex Sandro; Bentancur, Pjanic (Emre Can, 72’), Matuidi (Joao Cancelo, 84’); Mandzukic, Dybala (Bernardeschi, 80’) y Ronaldo.
Árbitro: Felix Zwayer (Alemania). Mostró tarjeta amarilla a los locales Diego Costa (8’), Thomas (45’) y Griezmann (88’); y al visitante Alex Sandro (55’).
GOLES:
1-0. 78’. Giménez marca desde el suelo en el interior del área tras un saque de esquina lanzado por Lemar.
2-0. 83’. Godín remata a la red tras una falta lanzada por Griezmann.
