Rayka Zehtabchi gana el Óscar a mejor cortometraje documental por Una revolución en toda regla. Disponible en Netflix.
25 de febrero del 2019. Edición numero 91 de los Óscars. Siglo XXI. Y se abre el debate acerca de la regla, sí, ese tema que aún a día de hoy, nos cuesta hablar de él, nos avergüenza, sobre todo si estamos delante de un sector mayoritariamente masculino, pero el mismo que ha ganado un Óscar a mejor cortometraje documental.
Podría incluso apresurarme y afirmar que sigue siendo un tabú, pero no considero que sea esa la definición que mejor se le ajuste, al menos en nuestra sociedad, en la que el movimiento feminista está rompiendo con muchas barreras que hemos ido heredando del patriarcado, y con la que hemos convivido, asumiéndolas. Y por supuesto, la menstruación es una de ellas.
Así, en Period. End of sentence vemos cómo todas las sociedades no evolucionan al mismo ritmo, y mucho menos en aquellas donde hay una desinformación tremenda y una presencia prácticamente inherente del machismo.
“Lo que sucede es que en presencia del patriarcado nos cuesta un tiempo hablar de algo relacionado con las mujeres” es la afirmación de una chica en el corto. Y desde luego es así, y seguirá ocurriendo, aunque me esperanza ver aparecer a directoras como Rayka Zehtabchi que se atrevan a alzar la voz, la misma que no escuchamos en los medios, y denuncien problemas sociales que nos hagan despertar, para poder darnos cuenta de que siguen siendo latentes, aunque nos pillen bastante lejos.
La historia transcurre en el distrito de Hapur a tan solo 60 kilómetros de Nueva Delhi, el corazón del poder ejecutivo, legislativo y judicial del Gobierno de la India y perteneciente a uno de los nueve distritos que conforman Delhi. Allí, le preguntas a niñas, mujeres u hombres: ¿Qué es la regla?, y no saben responderte, quizás se atrevan a hacerlo de manera tímida, entre risas y miradas al vacío, pero no saben darte una respuesta contundente y sin tapujos.
The Pad Project da el paso al cambio y revoluciona Hapur. El proyecto ofrece trabajo a mujeres haciendo compresas, para después venderlas por el pueblo y darles, de esa manera, independencia económica. Una forma de sentirse parte de la sociedad, ofreciendo su trabajo, hasta ese momento «solo disponible para hombres». De hecho, en el documental aparece el testimonio de una mujer que dejó sus estudios por tener la regla, no sabía cómo afrontar la situación y no recibía apoyo por parte de nadie, solo burlas.
Cuando vi que el documental estaba en Netflix y duraba menos de media hora, ni me lo pensé, empecé a verlo y me quedé con dos frases que resumen bastante bien los mensajes del corto, y de las que todo el mundo debería reflexionar, debatir y compartir con otras:
«El mundo no puede seguir adelante sin las mujeres. Somos las creadoras del universo».
«La criatura más fuerte que Dios creó en el mundo, no fue el león, ni el elefante, ni el tigre. Fue la mujer».
Rayka Zehtabchi inicia la revolución.
Aquí debajo puedes ver el tráiler del documental: