Tres 60, la película de Alejandro Ezcurdia que nos enseña que lo que hoy podemos defender mañana podemos vulnerar, por cuestión de supervivencia o, simplemente, por amor
Tres 60 nos cuenta la historia de la monótona vida de Guillermo (Raúl Mérida), la cual da un giro inesperado. Todo ocurre cuando un día cualquiera entre sus clases en la universidad, y las tardes de surf con sus amigos, se encuentra un carrete de fotos antiguas. Lo que empezó siendo un táctica para ligar con Daniela (Sara Sálamo) se convertirá en una intensa investigación que cambiará su vida.
Tras el revelado de las fotos, Guillermo comienza a indagar sobre el caso cerrado de la desaparición de su amigo de la infancia. El joven se someterá a situaciones que jamás pensaría que se podría someter para llegar al fondo del asunto. Estas situaciones tan extremas a las que el personaje se somete son las que quitan un poco de credibilidad al film. Esto provoca que el espectador desconecte de la película y pierda interés en algunas secuencias.
La investigación se va desarrollando a la vez que evoluciona el romance entre Guillermo y Daniela. El desarrollo de la historia es aprovechado por el director para realizar una crítica a los negocios adversos que existen en nuestro país, y no se denuncian. Debido a que los principales implicados son altos cargos de diferentes áreas como el cuerpo de policía, la medicina e incluso la Iglesia.
Guillermo, a pesar de todas las trabas que ha tenido que superar, consigue lograr la prueba definitiva. La que le permitirá denunciar la verdadera razón de la desaparición de su amigo. Cuando todo parecía tener fin, una carretera resbaladiza y un mal juego de pedales harán que su vida cambie otros trescientos sesenta grados más y tenga que elegir entre amor o amistad.
