Sebastián Yatra puso a bailar y cantar a las más de 60.000 personas que abarrotaron el auditorio vigués para disfrutar del Dharma Tour.
El Auditorio de Castrelos se llenó el miércoles para disfrutar del concierto de Sebastián Yatra. La cita prometía ser multitudinaria a pesar del calor y decenas de seguidores aguardaron bajo el sol horas antes del inicio del concierto.
Asegurado el completo en la zona del foso, la más cercana al escenario y para la que era necesario comprar entrada —los 5.000 pases se agotaron enseguida—, el resto del recinto no tardó en abarrotarse. El Concello de Vigo estima que más de 60.000 personas se congregaron para seguir el espectáculo del artista colombiano, que llegó a la ciudad olívica con su gira internacional Dharma.
La primera ovación de la noche fue para el alcalde de Vigo, Abel Caballero, que como es habitual ejerció de telonero. «De nuevo aquí después de la pandemia en el mejor auditorio natural del mundo«, señalaba. Aunque no llegó a confirmarse, había indicios de que el colombiano iba a ser uno de los cabeza de cartel de Vigo en Festas 2020. Además, el regidor bromeó con la temperatura que abrasó a la ciudad: «Mandé bajar un poquito el calor«.
Enfundado en un traje platino y con la cabeza cubierta con la capucha, Sebastián Yatra irrumpió en Castrelos entre gritos de euforia y puso a bailar al público con Melancólicos anónimos y Modo avión. La fiesta siguió con uno de sus temas más populares: Tacones rojos. Los asistentes se dejaron la voz cantando y continuaron bailando. El cantante incluso les dejó cantar solos el estribillo para comprobar que se sabían la letra.
Derroche de energía, intensidad y emoción
Durante casi dos horas Sebastián Yatra hizo disfrutar a los asistentes con un espectáculo dinámico y enérgico. El artista no paró ni un segundo. Se paseó por el escenario, bailó y hasta se acercó en varias ocasiones al público que estaba en primera fila. Además, se cambió varias veces de ropa, con pequeñas pausas en las que su cuerpo de baile o su banda tuvo protagonismo.
Castrelos se vino abajo con temas como Traicionera, Dharma y Cristina, pero también hubo momentos íntimos con canciones más lentas y nostálgicas. Así, interpretó a piano Cómo mirarte y Devuélveme el corazón, con los asistentes cantando junto a él e iluminando el auditorio con sus linternas. «Les amo mucho. No puedo creer que haya tanta gente aquí esta noche«, confesaba visiblemente emocionado.
El cantante se mostró muy a gusto en la ciudad y sin creer bien lo que estaba viendo y viviendo. «Nunca he estado tan emocionado por esta parte. Vamos a ver qué lado canta más fuerte, Vigo«, expresaba para pedir al público que cantara el estribillo de Ya no tiene novio. Ante la respuesta del público gritó un «¡Viva Vigo!» que enloqueció a sus seguidores vigueses.
Otro momento destacado de la noche llegó con Por fin te encontré. Sebastián Yatra comentó que fue la primera canción suya que sonó en España y que la iba a cantar «más fuerte que en cualquier otro lado» ante la gran cantidad de asistentes que siguieron el espectáculo y cantaron junto a él. «Este es el público más grande que he tenido en España en toda mi vida«, apuntaba.
Dos años esperando para escuchar a Yatra en Vigo
Sebastián Yatra anunció en 2020, antes de la pandemia, que iba a actuar en Vigo, pero la situación obligó a aplazar el encuentro. Hubo que esperar hasta el 13 de julio de 2022 para disfrutar del artista, pero la espera mereció la pena. Entre el público había personas de varias nacionalidades y de un rango amplio de edad, desde niños que acudían por primera vez a un concierto hasta personas mayores.
La noche fue mágica e inolvidable. Uno de los momentos más emotivos se produjo con Un año. Los asistentes comenzaron a cantar al escuchar los primeros acordes que brotaban de la guitarra de Toby Tobón, que le dio un toque flamenco a la canción. Antes de interpretar el tema, Sebastián Yatra abrió su corazón y compartió sus pensamientos con el público. «Hay cosas por las que vale la pena esperar y muchas veces en esa espera estamos esperando que llegue lo que tanto anhelamos. La realidad es que no siempre llega lo que queremos pero al esperar por amor desarrollamos cosas tan lindas como la paciencia, la incondicionalidad, la empatía…», reflexionaba mientras la luz de las linternas volvía a iluminar Castrelos, creando el ambiente perfecto para Un año.
Los asistentes enloquecieron también al escuchar los primeros acordes de No hay nadie más y cantaron desde el primer segundo. El artista les concedió protagonismo en momentos puntuales dejándolos cantar solos mientras tocaba la guitarra.
Un final ‘ideal’
Los asistentes no querían que la noche acabara, pero el espectáculo entraba en la recta final. Así, tras interpretar Robarte un beso, el cantante amenazó con irse. «De ustedes depende que siga el show o no. Para no irme necesito un montón de luz«, indicaba Sebastián Yatra para volver a cantar un trozo de Tacones rojos con el auditorio iluminado, de nuevo, por las linternas. El público volvió a entregarse, demostrando que conservaban energía para participar y darlo todo con las últimas canciones.
Chica ideal fue la siguiente en sonar y desatar la locura. Los asistentes cantaron y bailaron y no tardaron en pedir «otra, otra» cuando el artista y su equipo abandonaron el escenario. La despedida definitiva llegó con Pareja del año, que fue el broche de oro a la cita. «Gracias por una noche que se me va a quedar guardada y grabada«, confesaba Sebastián Yatra, reiterando su agradecimiento por las miles de personas que llenaron el auditorio vigués. Envuelto en la bandera de Vigo pidió a los asistentes cantar por última vez el estribillo de la canción y desde un tono más emotivo. El artista se marchó de la ciudad ovacionado por la multitud y dejando al público con ganas de más.
