Tras meses y meses de espera, la cantante navarra, volvía a Sevilla a la Sala Custom este sábado, dando un espectáculo que no dejó indiferente a nadie.
Había muchas ganas de escucharla de nuevo en directo, y los fans Sevillanos de la cantante, crearon una cola de espera horas antes de que se abrieran las puertas de la sala. Sin duda, eso fue lo más especial y determinante de la noche, las ganas, tanto del público, como de la cantante y su banda. La energía tan bonita que crearon entre todos se podía percibir casi de forma física en el ambiente.
La canción con la que arrancó el concierto fue “Nuestro Nombre”, uno de sus temas más movidos con lo que dejó claro que aquella noche, quería darlo todo. Al terminar la canción, se mostró especialmente emocionada de estar allí de nuevo y expresó lo importante que era para ella ver entre el público tantas caras de felicidad.
Las canciones que siguieron a esta fueron: “boys”, “algo duele más” y “gata negra”, haciendo alarde de su capacidad para crear un pop sofisticado, con letras que conectaban muy fácilmente con la cotidianidad del público. Además, la cantante acompañaba las canciones moviéndose de una forma muy elegante con la que nos cautivó a todos.
Durante la hora y media que duró el concierto, la cantante interpretó alguno de sus temas más conocidos como “Nana triste”, “A otro lado”, y “olvídate de mí”, la balada con la que generó uno de los momentos más especiales de la noche, debido a la entrega del público y al juego de luces que acompañó a la canción. Sin embargo, lo más destacable del concierto de anoche, fue que la artista, interpretó tres de las nuevas canciones que formarán parte de su próximo disco. La primera de ellas fue “El círculo”, una canción pop, con ritmos muy similares a “Muchas cosas”, su último lanzamiento. Las otras dos canciones nuevas fueron: “Medicina” y “Mi sitio”, dos baladas que tuvieron mucho éxito entre el público.
De esta forma, llegó el final del concierto interpretando “Quiero dormir contigo”, canción que ella misma calificó como un homenaje al colectivo LGTBIQ. Al despedirse, la cantante tuvo que aparecer una vez más por el escenario, ya que el público se había quedado con ganas de más y le pedían otra canción. Sin embargo, la cantante volvió al escenario no para cantar, sino para bailar con el público “La combi Versace” de Rosalía, creando otro de los momentos más divertidos de la noche.
Después de este concierto lleno de tan buen rollo, queda claro que Natalia Lacunza tendrá que volver a Sevilla, aunque no sea en feria, tal y como el publicó le pidió entre gritos y palmas, con mucho arte.
