HBO lanzó ayer el último episodio de la tercera temporada de «Killing Eve». Un final diferente que muestra el lado más humano de su psicópata protagonista.
Desde que la directora y actriz británica Phoebe Waller-Bridge (conocida por series como «Run», «Fleabag» o «Crashing») decidiera adaptar televisivamente la saga de novelas de Luke Jennings, Codename Villanelle, el salto de la extraña relación de sus protagonistas a la pantalla ha sido toda una catarsis para los espectadores. Sin embargo, esta tercera temporada ha querido dejar de lado el «juego del ratón y el gato» al que nos tenían acostumbrados y ha optado por realizar un viaje más personal por el personaje de la asesina a sueldo, Villanelle (Jodie Comer).
Barcelona, la nueva guarida de la sicaria rusa
Casada con una española y aparentemente «feliz». Así se nos presenta a Villanelle en esta nueva temporada que, por el contrario, comienza con una Eve (Sandra Oh) completamente devastada. Mientras una lidia con el comienzo de una nueva vida que está bastante lejos de contentarla, la otra se enfrenta al hecho de haber perdido todo lo que entendía por tener una vida. Este es el punto de partida de una temporada en la que Villanelle se asentará en la ciudad condal de Barcelona, paseando al público por lugares tan míticos de la capital como el Arco de Triunfo, el Paseo del Borne o el teleférico aéreo que conecta el puerto con Montjuïc.
Jodie Comer como Villanelle en el episodio 2 de la temporada 3. Fuente: HBO
Rompiendo con todas las expectativas
Asesinatos por doquier. Persecuciones angustiosas. Ciudades de ensueño. Era a lo que las temporadas 1 y 2 nos tenían acostumbrados y era de esperar que esta nueva temporada prometiera más de lo mismo. Pero nada que ver. Los productores, con Sally Woodward a la cabeza, han hecho que cada capítulo parezca una subtrama diferente dentro de la propia trama. Empezando por una boda, pasando por un cumpleaños con payasos, llegando a una redacción de un periódico y hasta a un pueblo perdido de Rusia. Todo cuenta a favor en una temporada que busca encarecidamente hacernos empatizar más con el personaje de Villanelle y su instinto asesino.
Sandra Oh como Eve Polastri en el episodio 4 de la temporada 3. Fuente: HBO
Una cuarta temporada renovada y dispuesta a cambios
AMC Networks y BBC America anunciaban la renovación de la serie por una cuarta temporada incluso varios meses antes de haber estrenado la tercera entrega. Todas las voces apuntaban a que la serie continuaría con su ya particular tradición de poner a una mujer a cargo de la redacción del guion. Y así ha sido, con Laura Neal («Sex Education«) sumándose a la lista de mujeres que han contribuido a que la historia de Villanelle cobre vida en la pequeña pantalla. De momento, la productora de la serie solo se ha pronunciado sobre el posible rumbo de la temporada afirmando que: «Cambiar es posible». Ahora solo queda esperar a que el talento de este equipo, eminentemente femenino, haga su magia y nos deleite con, quien sabe si quizás, la última temporada de Killing Eve.
Fiona Shaw como Carolyn Martens en el episodio 1 de la temporada 3. Fuente: HBO
