El escritor extremeño ha llegado al cénit de su carrera logrando el galardón más prestigioso del panorama literario español.
La literatura española suma y sigue generando glorias literarias desde el sello Planeta. La última ha sido el columnista del diario El País Javier Cercas.
Terra Alta ha sido la obra que ha permitido que se cumpla la profecía que tanto difundían sus vecinos. Considera que ha marcado la diferencia gracias a un thriller enfocado en la historia más reciente. Un guardia civil, Melchor Marín, retrata el carácter de héroes anónimos que salvaguardó a la población catalana tras al atentado yihadista surgido hace dos años en Barcelona mientras se narra la crisis de un matrimonio burgués.
«Es la primera vez en mi vida que me presento a un premio literario». «Cada año, mis vecinos y la portera me dicen ‘no se preocupe, algún día ganará el Planeta’. Es, para mí, un libro especial y la mejor manera de darlo a conocer era este premio. El peligro de los escritores es repetirnos, y este libro es un intento de cambiar, de convertirme en otro escritor, es radicalmente distinto de todo lo que he hecho. Hasta ahora, mis libros los concebía como policíacos en que el culpable se conocía al principio. En este caso, hay que llegar a la última página para saberlo”. En la comarca de la Terra Alta, “una mañana, aparecen asesinados en su masía los propietarios de la mayor empresa del lugar”, ha expresado tras haber recibido el premio.
Soldados de Salamina (2001),Anatomía de un instante (2009) como escudriñamiento del 23-F y El monarca de las sombras (2017) como retrato de la guerra civil vivida a través de un familiar plasman su capacidad de unir la imaginación en un contesto histórico. Ya ha cumplido la mayoría de edad en el panorama literario y seguro que seguirá dando alegrías.
Javier Cercas no fue el único triunfador de la noche. El aragonés Manuel Vilas (Barbastro, 1962) fue finalista del certamen. Su sumergimiento en la madurez de la vida le ha motivado a lucir una pluma con tintes autobiográficos. Este hecho le ha permitido llegar a ostentar el título de finalista gracias a su obra Alegría, título no perteneciente al sello Planeta.
Sin duda, ellos han sido los más felices en la gala celebrada en una Barcelona aterrada por los acontecimientos políticos emergentes. Sin embargo, los libros son fábricas de sueños y escritores del calibre de Manuel Ríos San Martín, Inés Plana, David Orange o María Dueñas, entre otros. acompañaron a los máximos triunfadores.
La unión entre ellos reflejaron cómo la pasión hacia un oficio vocacional como es el de escritor une para que la propia profesión sea la que gane. Ese es el espíritu que se necesita mantener en la carrera hacia el Premio Planeta 2020.