El pasado 11 de marzo María Peláe estrenó su nuevo disco, ‘La Folcrónica’. Un álbum donde la artista fusiona estilos musicales desde los ritmos más latinos hasta su raíz más flamenca.
“Ay que ruina más grande, quién me mandaría a mí dedicarme al cante”. Estos fueron los primeros versos que la cantautora malagueña, María Peláe, tarareaba para promocionar, hace seis años, el crowdfunding de su primer disco que vio la luz en 2017, La Hipocondría.
Tras más de una década sobre las tablas, en bolos donde la gente te ve pero apenas escucha, Peláe ha sembrado un camino que a base de trabajo, sus aires flamencos y una guitarra la han llevado hasta La Folcrónica. Este segundo trabajo discográfico cuenta con la producción de Alba Reig, Riki Rivera y Alain Pérez.
El álbum ya prometía antes de ser publicado tras conocer singles como La Quería o La Niña que han sido regrabados y reditados para consolidarse entre las 12 canciones que dan vida al trabajo compuesto por “mujeres del arte”.
Estilo Peláe
Sería difícil encasillar dentro de un mismo estilo a la artista y su obra. Desde sus andaduras en la música, María Peláe ha mostrado su versatilidad para fundirse en diferentes géneros y este trabajo no iba a ser menos.
La Confesión (2021) es uno de los temas que la artista ha rescatado para abrir el álbum. A base de ritmos urbanos Peláe critica y pone la mira en uno de los pecados capitales, la lujuria. Single que, en aquel momento, aterrizaba como el más arriesgado de la artista.
El punteo de la guitarra conduce a la corriente más flamenca de la cantante en Por si te vas, el abrazo de la cantautora hacia el amor propio. Los coros y las palmas de Riki Rivera entontan la reconciliación con uno mismo tras una mala relación. “Volver a volver no me vale porque estoy ya muy cansada de no tener valor”.
La ironía llega al álbum de la mano de Y quién no (2020), el estilo Peláe reina una vez más en la producción entrelazando los sonidos más actuales con el folclore. El pregón de la malagueña recae sobre el uso excesivo de las redes sociales y tratar de aparentar a través de ellas.
Mujeres del arte
La primera colaboración de La Folcrónica lleva el nombre de la cantaora Sandra Carrasco. Esta historia reivindicativa y autobiográfica, mira desafiante a los haters esperándolos en jarra. “Qué fácil es saltarse las alarmas sin el foco en tu cara”. Ambas artistas se empoderan en este single para realizar una declaración de intenciones.
María Peláe ya alentaba que este disco sería de “mujeres del arte”, y es que la siguiente canción celebra la vuelta de Las Niñas en Cuéntale. El flamenco-funky en este “fitureo” siembra la esencia del grupo más reivindicativo de los 2000 y el que más ha hecho mella en la artista, según ha declarado en entrevistas anteriores. Alba Molina, Aurora Power y Vicky Luna han vuelto a la música, tras 15 años, por la puerta grande.
La percusión de Antonio Bravo junto a la guitarra de Rivera y el baile guiado por Rubén Puertas presentaban en 2021 a La Quería. Casi un año después, este tema viene más renovado en su producción y en esencia, fruto de la fusión entre las voces de la malagueña y Pastora Soler. Una invitada que rinde honor al lado más elegante del despecho.
Tras el flamenco, su fusión funky y ritmos urbanos, María no ha dejado ni un resquicio de su nuevo álbum por sorprender. Se trata de la salsa producida por Alain Pérez interpretada por Nia Correia en Cómo están las cosas. Reproche e ironía visten los compases latinos del single.
Que vengan a por mí, quizás sea el tema que más conecta con la raíz de cantautora de la artista. La vuelta a sus inicios a base de voz y guitarra. Este tema es un paso al frente para reivindicar la libertad. “Es el respeto la virtud del más valiente”. La crítica social cincela las composiciones de María, “que me condenen por hablar de libertad, se os ha quedado bonito este país para vivir”.
Siguiendo la misma línea vindicativa, apegado a sonidos urbanos llega Mi tío Juan. Peláe hace referencia a aquellas personas que no han podido vivir su vida como realmente quieren.
El lado más sensible surge en las orillas de Historia de vida el bolero que interpreta junto a Vanesa Martín. Una vuelta de tuerca del amor a la realidad, y su viaje por las diferentes etapas de la vida. El piano de Ale Romero bajo la producción de Alba Reig rompe los esquemas desde el primer minuto.
La Niña no podía quedarse fuera del setlist, tema que ya acumula las tres millones de visitas y acogió tan bien a la crítica. Tanguillo del desahogo cierra el segundo trabajo de la artista. Una de las canciones que más evidencian su admiración por Lola Flores.
La Folcrónica
Reivindicación, crítica social, empoderamiento, amor y despecho. Todo ello abarcando una influencia de vertientes musicales desde la más urbana al bolero más sensible. María Peláe en este disco abre las puertas hacia una evolución que la ha hecho crecer sin olvidar su raíz de cantautora de las que fueron testigos las primeras salas de conciertos. El álbum y el trabajo bien cuidado en su producción prometen vestir las canciones de largo en el directo. A La Folcrónica le sobra verdad.
