Sonic vuelve a la gran pantalla y esta vez lo hace de forma definitiva, dando un entusiasta empujón al cine basado en videojuegos.
Parecía que Sonic estaba predestinada a fracasar. De hecho, tras su primer trailer, medio mundo quedó decepcionado con el look hiperrealista del erizo azul, los espectadores lo rechazaron y se exigió un cambio drástico. Paramount Pictures se puso manos a la obra y finalmente nos ha entregado un despliegue de efectos visuales sobresaliente. La película cuenta con espectaculares secuencias que manejan la cámara lenta, que recuerdan al mismísimo Quicksilver de X-Men: Días del futuro pasado. ¡Chapó!
La historia que se nos plantea es simple, de hecho, es de carácter genérico y no sorprende en ningún momento, juega a ser una buddy-movie apta para todos los públicos y en muchas ocasiones se queda a medias tintas, sin embargo, Sonic está creada con corazón y no reniega de si misma. Los personajes son entrañables por sus objetivos, los cuales se sienten realistas y cercanos a nosotros: proteger a los seres queridos, hacer amigos o disfrutar del momento. Esto, lejos de hacer al film soso e infantil, lo convierte en un espejo en el que tanto los niños como los adultos pueden verse reflejados e identificados.
Sonic, imágenes cedidas por Paramount Pictures Spain
Si podemos comparar Sonic con alguna obra reciente, nos viene de forma rápida a la cabeza Detective Pikachu (2019). Son dos cintas que comparten un espíritu muy semejante, además, tienen personajes muy parecidos que buscan adaptarse al enorme e inexplorado mundo en el que se encuentran. Por otro lado, ambas toman direcciones muy distintas: Sonic se deja llevar por el humor, centrado en hacernos reír y disfrutar con cientos de referencias a la cultura pop. Desde canciones de Queen a un guiño a Obi-Wan, pasando por poner a su protagonista a montar un toro mecánico hasta hilarantes conversaciones entre un humano y diversos animales, tiene cartas para lograr ser entretenida y la película es consciente de ello.
Jim Carrey es quizá el factor más agridulce de toda la experiencia, es un personaje que roza lo ridículo y es tan estereotípico que si no te adaptas a su acting, es fácil sentir vergüenza ajena cada vez que aparece en pantalla. A pesar de todo, el está totalmente entregado a su labor y se marca muchos tantos durante el metraje, Robotnik guarda muchísimas sorpresas.
Jim Carrey, SONIC, imágenes cedidas por Paramount Pictures Spain
El cine basado en videojuegos está viviendo una nueva vida. Los proyectos son más ambiciosos y a pesar de no tener grandes pretensiones, funcionan de forma más efectiva que antaño. Donde antes había una clara obsesión por adaptar de forma ejemplar, ahora hay más ganas de sumergir al público en maravillosos mundos puestos a nuestra disposición.
