Histeria de España es el título que da nombre a la nueva creación de Kikol Grau (coordinador), María Cañas y Carolina Cabrerizo, entre muchos otros directores. La película ha sido proyectada en tres pases durante el Festival de Cine Europeo de Sevilla
Aunque parezca inusual o poco habitual, a los estudiantes de Periodismo también nos interesa el cine; sí, no tenemos asignaturas que versen sobre este arte (qué más me gustaría). Pero cuando vemos un seminario sobre “Historias e inercias del cine español” ahí estamos los primeros; al menos, si nos movemos en el ámbito cultural.
Histeria de España desde Sevilla
El Festival de Cine Europeo de Sevilla está teniendo lugar entre los días 03 y 11 de noviembre, contando con actividades tales como el seminario al que asistí.
Llama la atención que se dedique tiempo y mucho detenimiento a a hablar de uno de los cines más maltratados: el nuestro, el cine español. Es cierto que soy la primera que se lo piensa dos veces antes de pagar por una película nacional. Y es por ello que aproveché esta oportunidad para intentar perder este prejuicio tan frecuente.
Entre los múltiples títulos disponibles, uno llamó especialmente mi atención: Histeria de España. ¿Y esto qué es? Pues vamos a intentar explicarlo:
¿Cuando te dicen la palabra collage, qué imaginas? Una cartulina con recortes de periódicos, fotografías, purpurina y pegamento. Bien. ¿Y si te dicen collage audiovisual? Trozos de informativos, de programas políticos de principios de siglo, de canciones… Bueno, pues esta es la creación de Kikol Grau y su equipo, un cadáver exquisito en el que cada uno de los más de 20 directores que conforman esta obra han aportado su granito de arena.
Una España hecha de trozos frustrantes de la sociedad. De discursos chirriantes que pensamos dejar atrás hace años, pero que si te paras a escuchar detenidamente, atisbas a oír sin mucha modificación en algún bar. De conflictos que resurgen de sus cenizas, como una premonición o un bucle constante que nos hace preguntarnos si hay cosas que no tienen solución; si el ser humano vuelve a caer en la misma piedra porque añora la vista que tenía desde el suelo.
“Nos ha quedado hasta graciosa”, comentó Kikol Grau antes de la proyección, y no puedo estar más de acuerdo. Pues hubo risa; risa histérica. Histeria de España.
