Este otoño llegó para emocionar la irracionable relación de amor de Will y Stella, protagonizados por Cole Sprouse y Haley Lu Richardson.
Se avecinaba una cursilada romántica de amor juvenil más, pero a los diez minutos de empezar, caló tan hondo en mí que me rompió todos los esquemas. Cuando pensaba que ningún film romántico me iba a dar más pena que Titanic o El diario de Noah, llegó el amor imposible de Will y Stella en A dos metros de ti.
Antes de entrar a ver la obra, ya tenía una idea preconcebida. A dos metros de ti iba a ser una copia de Tres metros sobre el cielo. Estaba claro: desde América vieron hace unos años la explosión de Mario Casas con esta película y, aunque atrasados, tenían que igualarnos o superarnos. Habían pasado cinco minutos de película y mi cabeza ya soñaba con otra segunda parte del amor de Hache y Babi, esta vez en un hospital, tras la desastrosa carrera de motos.
No obstante, aunque incluso la personalidad de los protagonistas es igual en ambas películas, la trama no se parece en nada. Will, interpretado por Core Sprouse, tiene la actitud de aquel gamberro que se quiere saltar las normas, un Hache en la ficción, mientras que Stella, Haley Lu Richardson, es una Babi tímida con el único propósito de hacer las cosas correctamente.
Con estos dos protagonistas, Justin Baldoni volvió a la gran pantalla tras cinco años centrado en producir únicamente televisión. Nunca antes este director había apostado por el romanticismo, aunque lo ha cumplido con altas expectativas. Le ha dado un giro inesperado al concepto de amor, surgiendo entre dos personas muy distintas que nunca se podrán llegar a tocar, ¿o quizás sí?
Ficha técnica
- Título original: Five Feet Apart
- Año: 2019
- Duración: 116 min
- Dirección: Justin Baldoni
- Protagonistas: Core Sprouse y Haley Lu Richardson
