El Sevilla gana el primer asalto de los octavos de final de la Copa ante un Athletic que pensó más en la liga.
Como se podía augurar ambos equipos salieron con la mente puesta en el partido que les enfrentará el próximo sábado. Las alineaciones delataron a los dos entrenadores, más si cabe a un Gaizka Garitano que con buen criterio valoró y antepuso la importancia que tiene seguir sumando de tres en liga y alejarse cada vez más de los puestos de descenso. El deriotarra alineó a jugadores que no están disfrutando de muchos minutos, reservando así a los titulares.
Antes de que a la mitad de los espectadores les diera tiempo a acomodarse en sus butacas, Nolito abrió el marcador, consiguiendo el tan ansiado gol fuera de casa que en muchas ocasiones resulta determinante. El Athletic a partir del tanto del Sevilla comenzó a tener el dominio y control de balón, pero sin generar apenas peligro.
A falta de cinco minutos para que acabara la primera parte, Aduriz, el valuarte ofensivo del equipo, anotó un tanto que el VAR se encargaría de anular por un fuera de juego en el origen de la jugada del guipuzcoano. La mala noticia fue doble para el Athletic, pues el delantero se lesionaría y sería sustituido.
A los pocos minutos de comenzar el segundo tiempo, Mikel San José conseguiría el empate y traer la emoción a un partido presumiblemente infravalorado por la urgencia en liga. Poco le duraría la alegría a los leones, cuatro minutos después André Silva pondría por delante otra vez a los hispalenses. Ya en el minuto 77 Ben Yedder se encargaría de encarrilar la eliminatoria para los visitantes.
Los dos equipos se volverán a enfrentar en liga en San Mamés la próxima jornada, Garitano alineará a su mejor plantel e intentará conseguir los tres punto prolongando así su buena racha y la mejoría de su equipo. Será un partido completamente distinto el que jugarán otra vez los dos conjuntos.