Porque no hay mejor manera que comenzar un fin de semana entrando en la magia de MrKilombo y sus conciertos.
Y entre la espera y desespera de un público impaciente con ganas de bailar al ritmo de cumbia tan característico del protagonista; Miki, tras pequeños problemas del directo, sube al escenario eclipsándonos con su peculiar sonrisa. Y es así, como sin darnos cuenta nos sumerge durante más de hora y media de espectáculo en compases salseros o pequeños boleros.
MrKilombo presenta nuevo sencillo y con él arranca nueva gira de conciertos, la cual se encuentra aun abierta puesto que poco a poco se van añadiendo fechas y nuevas ciudades por visitar. Pero ayer, viernes 12, se dejó caer por León, donde pudimos disfrutar del que es hoy uno de los cantautores más cercanos y sinceros de nuestro actual panorama musical.
Querido, déjanos darte las gracias por no cancelar el concierto, ya que como él mismo nos contó durante la actuación, había sufrido un corte peligroso en su mano izquierda, el cual casi le juega una mala pasada, pero ahora bien, nos confesó que estaba descubriendo dos cosas que no podía hacer: dar palmas y atarse los cordones; pero sorprendentemente, no tenía dificultades a la hora de tocar la guitarra. Así que, sí, gracias por subir a cantar y hacernos disfrutar tanto con cada canción.
La pequeña ciudad leonesa acogió una vez más al cantautor, el cual, en esta ocasión venia acompañado formando un estupendo trío calavera, en los que la percusión y el viento hicieron base y acorde a sus ritmos más cañeros consiguiendo que todo el público se arrancase a bailar, alzar en voz en grito toda letra y acompañar entre palmas cada estribillo.
Y a pesar de conducirnos durante cada actuación entre un popurrí de todos sus discos, parando por temas como «La Caja de Pandora», «A veces ocurre», «Trampas», «Sinmigo» y otros tantos más, así como aceptar sugerencias de los espectadores, amigo siempre nos queda ese sabor agridulce de querer más, puesto que Miki consigue tenerte cautivado todo el tiempo con esa sensación continua de no buscarle un punto y final al concierto.
Por lo que, no cabe más que añadir que puedes llegar tarde otra vez que nosotros no cambiamos ya por nada ese ratito ahí a tu vera.