Las viviendas turísticas de la provincia de Málaga pronostican una ocupación del 40% en agosto, algo <<positivo>>, afirma Carlos Peréz-Lanzac.
La ocupación en los pisos vacacionales será del 20% o 25% en julio y que suba al 35% o 40% en agosto. Las viviendas turísticas en Málaga están experimentando un fuerte impacto, según el presidente de la Asociación que las agrupa y representa en Andalucía (AVVA). Este impacto es producido por la crisis sanitaria derivada de la COVID-19.
Pérez-Lanzac señala estos porcentajes como «fatales» ya que, en verano, suele facturarse el 70% al año. «Ello hace que muchas personas hayan entrado en un estrés importante por los problemas para pagar la hipoteca y las empresas, para mantener a sus plantillas», recalca. Las reservas crecen pero, posteriomente, surgen las cancelaciones debido a las varias noticias sobre rebrotes. El presidente destaca que «las reservas igual que llegaron, se van, hay mucha incertidumbre y preocupación».
Turistas llegan al aeropuerto de Málaga en el verano de 2018 / L. O. La Opinión de Málaga.
La mayor ayuda que podría recibir la provincia y, en sí, la comunidad autónoma es que las administradiones dieran protocolos y planificaciones concretas y con claridad. Además, Pérez-Lanzac explica que deberíamos saber como informar al turista y tenerlo todo más claro; por ejemplo, si se podría o no cerrar ciudades pues asesoran a los clientes y es necesario conocer la información y transmitir confianza.
Indica que el turismo mayoritario en Málaga es el nacional y que se ve un turismo europeo muy leve por parte de Francia y Holanda. Hablando del turismo nacional, en concreto visitan clientes de empresas o ejecutivos y trabajadores.
En las grandes urbes se está detectando un fenómeno de trasvase en las viviendas turísticas, pasando a ser de alquiler de larga duración. Este movimiento es por parte de los propietarios debido al parón turístico provocado por el coronavirus. Esto crea que las rentabilidades crezcan también pues los arrendamientos de mayor periodo no paranban de subir, al menos hasta poco antes de la pandemia.
Madrid y Barcelona son ejemplos de arrendamientos de larga duración en vez de viviendas turísticas, llegando al 10 porciento; mientras, en el país, la media es del 6%. A pesar de la situación, los precios suben en muchas ciudades. Recalca que la vivienda turística no es determinante en los precios del alquiler pues «el precio de larga temporada no parece subir».
El martes, según un informe de pisos.com, el precio del alquiler de vivienda descendió en Andalucía un 0,38% en junio en comparación al mes anterior. Dentro de la comunidad autónoma, Almería (1,25%) fue donde más se incrementó y Málaga (-10,68%) registró el tercer descenso más señalado en el país.
Jaén, en torno al apartado de rentas medias, fue la sexta más asequible en toda España. Si nos vamos al otro extremo, Málaga (956 euros / mes) fue la octava renta media mensual más alta a nivel nacional.
Las personas están esperando a ver cómo evoluciona el verano pues quieren saber si ir a una estancia de larga temporada o no. Aunque, según Pérez-Lanzac, las viviendas competitivas no tienen demanda de larga temporada. Estas son, por ejemplo, las que tienen vistas al mar o son villas con piscina y terraza o costeras como Torrox ya que «no existe esa opción».
Según AVVA, las reservas también son más largas frente a unos pocos días de pandemia, lo que resulta positivo. Recuerda que los principales clientes suelen ser familias que darán un 60% de gastos a comercios y hoteles.
AVVA nos informa también de que muestra unas 40.000 viviendas y, en relación al centro de la provincia, se ha hablado de un precio especial del parking con el precio de alquiler de la estancia.
