Hace unos años resultaba extraño observar viviendas con sus contadores de agua individualizados, pero en los últimos años está tendencia ha variado y ahora cada vivienda tiene el suyo propio. El contador de agua se encarga de medir y registrar el volumen de agua en metros cúbicos que pasa a través de él. Mediante este sistema, la empresa distribuidora del agua pasará posteriormente una factura a los clientes.
El contador de agua digital a diferencia con un medidor es que este es propiedad de la compañía suministradora por norma general y se encuentra verificado para así asegurar una correcta medición mientras que los medidores suelen ser tanto de particulares como de empresas. Su colocación es al inicio de la red de agua de la zona de abastecimiento para así realizar el seguimiento de los consumos en un circuito concreto de forma eficiente.
Existen distintos tipos de contadores de agua dependiendo de la complejidad o de la cantidad de datos que estos tienen que medir. En primer lugar, tenemos el contador mecánico manual que son los contadores fijos convencionales entre los que se encuentran los de lectura directa y los de manillas o relojes. También tenemos los lectores remotos vía radio que reciben la información de la lectura de forma electrónica y facilitan los consumos reales sin necesidad de que el técnico entre en los domicilios para la lectura. En estos tipos encontramos los contadores de agua individuales.
Los avances tecnológicos no han parado de crecer, como en cualquier sector y en el mundo de los contadores no será menos. Uno de los cambios más destacados que ha llegado a través de la tecnología es la lectura de los contadores de agua de una forma mucho más cómoda para los usuarios además con repartidores de costes de calefacción.
Los nuevos contadores son mucho más sostenibles y cuentan con unas grandes ventajas. A nivel técnico, existe una ausencia de cableados y el ciclo de vida de las baterías es mucho más amplio con la misma instalación. Entre el contador y la central la comunicación es bidireccional por lo que el proceso de lectura es mucho más sencillo y a la hora de instalarse en la vivienda no se necesita obra para ser colocados.
Las métricas del agua con los contadores nuevos de ratio son el tiempo real, por lo que son mucho más transparentes. En caso de contar con alguna fuga son capaces de recibir alarmas y avisar así a los clientes para comprobar el suministro. Estos contadores disponen de unos parámetros verificables que actúan ante posibles manipulaciones en ellos. Y sin lugar a duda, son mucho más sostenibles.
El contador de agua nos permite conocer el consumo de agua que hemos tenido y al conocer los datos al instante, podemos aplicar distintas medidas de ahorro de consumo. En España por media general una persona gasta 137 litros al día entre ducharse, ir al baño, lavar los platos, la ropa, etc. Sí este consumo es muy elevado, las empresas que gestionan el contador nos avisarían. Con este realizamos una evaluación de forma eficiente de las medidas de ahorro llevadas adelante como de las instalaciones de paralizadores o dobles pulsadores en las cisternas.
En conclusión, gracias a la nueva tecnología del sector de los contadores de agua tenemos la capacidad de optimizar el consumo pudiendo controlar cualquier variable por nuestra economía y el medio ambiente.
