El Ayuntamiento de Madrid ha capturado 2.025 cotorras desde el mes de mayo.
Desde el mes de mayo se encuentra en vigor el contrato para la despoblación de la cotorra. Desde ese mismo mes ya se han capturado 2.025 cotorras argentinas y de kramer de una población de más de 13.000. Más de 400 se han retirado ya que contenían unos 56 huevos.
Estos datos provienen del delegado de Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, tras las acusaciones del portavoz socialista, Ignacio Benito. El portavoz acusa al Gobierno municipal de cometer una «masacre» y una «carnicería» contra estas aves al acabar con ellas con disparos por carabina. Carabante defiende la práctica al estar establecida por la Comunidad en circunstancias esporádicas.
Desde el Partido Socialista acusan a los gobiernos madrileños de “inacción” lo que habría provocado la multiplicación de las cotorras. Para el socialista la reducción de la población de cotorras es necesario, pero las medidas son exageradas y no tienen en cuenta el bienestar animal.
Benito se ha preguntado si son «prácticas razonables resolver los problemas de la ciudad con escopetas». El PSOE aboga por una gestión ética de estas especies «que no pase por la muerte sino por la esterilización porque la naturaleza es sabia y la población irá menguando».
Reproches continuos
El plan municipal cuesta a los madrileños 230 euros por ejemplar abatido, lo que le ha llevado reclamar «medios menos cruentos y más sostenibles porque el actual riega de plomo los parques madrileños». Benito ha advertido que el plomo «acaba en el estómago de los animales».
El delegado, Borja Carabante, ha apuntado al gobierno anterior como principal responsable del aumento de la población de estas aves dado que nada más llegar al Ayuntamiento dio con un informe en el que se detallaba que los planes previstos para acotar esta población habían sido finalmente paralizados «sin atender a los peligros» y «sin medidas motivos técnicos, solo por motivos políticos».
Carabante además ha sugerido al concejal del PSOE que sea «coherente» porque «carnicerías» así también las perpetró entonces «el Ministerio de Fomento en sus instalaciones al abatir cotorras con carabinas, la Junta de Andalucía con el PSOE al avalar el uso de las carabinas o el alcalde socialista de Sevilla».