Si todo continúa como lo previsto en 2022 la nueva grada de Marcador estaría lista, pero las obras no empezarán antes de noviembre de 2020.
El Concello de Vigo prevé adjudicar la realización de las obras de la grada de Marcador del estadio de Balaídos en noviembre. El presupuesto base es de 16.650.000 euros, que financiarán el Concello de Vigo y la Deputación de Pontevedra. Ni el RC Celta ni la Xunta de Galicia aportarán dinero, algo que en varias ocasiones ha criticado el alcalde de Vigo, Abel Caballero. Las obras durarán 18 meses, así que la previsión es que en 2022 se pueda ver el resultado de este proyecto que se está demorando.
La nueva grada de Marcador podrá acoger hasta 6.418 personas. Se instalarán 2.791 butacas en Marcador Alto y 3.977 en Marcador Bajo. Para poder construir la nueva grada, primero se derrumbará la cubierta. Se adaptarán los espacios interiores destinados a la circulación, aseos, usos propios del estadio, de las instalaciones y de la zona comercial. Ocho ascensores conectarán cinco plantas, facilitando la movilidad entre los diferentes espacios. Se creará un semisótano, que podría usarse como sala de conferencias y almacenes. También se demolerán las torres exteriores de iluminación y se redistribuirán 60 focos.
Además de las actuaciones en la grada de Marcador, las obras incluyen también el cambio de las butacas en Río Bajo. Ante las múltiples quejas sobre el espacio ínfimo entre filas, se retirará una de cada cinco filas, ganando entre 15 y 18 centímetros, permitiendo a los asistentes gozar de mayor comodidad.