Rosario Porto ha sido hallada muerta tras cumplir varios meses en ese centro penitenciario por el presunto asesinato de su hija Asunta.
La madre de Asunta Basterra se ha suicidado esta mañana en su celda en la que se encontraba desde el pasado mes de marzo. Los funcionarios de prisión de Brieva (Ávila) han sido los que han encontrado el cuerpo de Rosario, que se encontraba con un cinturón de tela anudado al cuello, sujeto a una ventana. Los mismos funcionarios, cuando hicieron el recuento por la mañana, notaron la ausencia de la reclusa, lo que disparó las alarmas.
Según fuentes penitenciarias, ya había intentado quitarse la vida anteriormente pero sin éxito, por lo que se encontraba en permanente vigilancia. Hace apenas unos meses se le trasladó de prisión, con el objetivo de que su estado anímico mejorara y así lo hizo. Según trabajadores de este centro, su situación psicológica había mejorado tras este cambio, de hecho se cuidaba más e incluso pedía productos faciales a sus compañeras, por lo que incluso su psicóloga le había levantado el protocolo antisuicidios. Tras la posterior inspección de su celda, se ha comprobado que estaba recogida y sus enseres guardados, lo que da a entender que su decisión ya estaba tomada. Tras el hallazgo de Rosario en esta situación, los vigilantes llamaron al 112 pero ya nada se pudo hacer por ella.
El caso de Asunta Basterra tuvo bastante repercusión nacional en el año 2013 y despertó gran interés público. Rosario Porto y Alfonso Basterra eran una pareja con una carrera profesional de prestigio, ella era abogada y él periodista. Decidieron adoptar a una niña originaria de China, cuando solo contaba con un año de edad. El 21 de septiembre del año 2013, cuando Asunta tenía 12 años, Rosario y Alfonso denunciaron su desaparición. Tres horas después, dos viandantes encontraron el cuerpo de la niña sin vida, con cuerdas alrededor y signos de asfixia, a las afueras de Santiago de Compostela. La Justicia consideró la culpabilidad de ambos padres tras demostrarse que se le administró sedantes a la niña antes de asfixiarla, además de sus versiones contradictorias en las declaraciones y sus conversaciones en los calabozos.
Fue el 30 de octubre de 2015 cuando el jurado popular determinó por unanimidad que eran culpables del asesinato y ambos entraron en prisión. Alfonso Basterra sigue cumpliendo pena en la cárcel de Teixeiro, en A Coruña, sin embargo la que fue su mujer ha decidido quitarse la vida esta misma mañana, menos de un mes después de que el domicilio donde supuestamente mataron a la niña sufriera un aparatoso incendio y que cuyas causas aún estén siendo investigadas.