Cuando tenemos frío en nuestra vivienda, nos damos cuenta que tenemos un aislamiento térmico malo. Este debe ser correcto debido a que retendrá el calor que producimos gracias a la calefacción en invierno y el frío que producimos gracias al aire acondicionado en verano.
Pero exactamente, ¿Qué es el aislamiento térmico? Es la reducción de la transferencia de calor entre objetos en contacto o dentro del alcance de su radiación son reflejados. Es en una vivienda donde se considera al conjunto de materiales y técnicas. La acción principal del aislamiento térmico es el contacto o toque con un entorno menos o caliente.
El aislamiento de una vivienda es una cuestión muy importante que nos afecta a todos, por esa razón se recurre a los aislamientos por insuflado en Madrid. No solo por el confort, también por el ahorro económico que este tiene, por la salud o por otras razones. La vivienda es donde más horas al día pasamos, esta tiene que tener un buen aislamiento. Un buen aislamiento además puede evitar desperdiciar en un edificio hasta un 30% de energía, reduciéndose así la factura eléctrica como las emisiones de CO2 que perjudican al medio ambiente.
Instituciones públicas se encuentran en los últimos años obligando a constructoras de nuevas viviendas como casas o chalets a que cumplan unos mínimos de eficiencia energética. Además, desde el Gobierno se encuentran ofreciendo ayudas para rehabilitación de casas ya edificadas e incorporar estos sistemas de eficiencia energética. Una opción es recurrir a la empresa AislaMadrid para conseguir una vivienda perfecta.
Pero, ¿Cuáles son las ventajas que tiene un buen aislamiento térmico? Sin lugar a duda, este asegurará en primer lugar una temperatura de confort en el interior de la vivienda como también una temperatura constante independientemente de la estación del año en la que nos encontremos o de la temperatura exterior que haga.
Gracias a una vivienda bien aislada estaremos ahorrando energía de climatización tanto en invierno como en verano. El ahorro económico como medioambiental puede ser de hasta un 50% del gasto total que veníamos teniendo. Se consume menos energía por lo que gastamos menos y se reducen las emisiones de CO2. Además, en una vivienda bien aislada no aparece ninguna humedad por condensación.
Para aislar bien térmicamente se emplean tres tipos de materiales. Los celulares se caracterizan por poseer celdas cerradas o abiertas y se instalan por proyección o mediante paneles que pueden ser flexibles o rígidos. Luego nos podemos encontrar con los granulares que se conforman por pequeñas partículas que están elaboradas en material inorgánico como la vermiculita, mineral de silicatos de hierro o magnesio y la perlita expandida formada por vidrio volcánico. Y en último lugar nos encontramos con el material fibroso que estos aislantes están compuestos por filamentos de alta porosidad.
En conclusión, debemos prestar una gran atención al aislamiento térmico. En una vivienda perdemos el 35% de la energía calorífica a través de fachadas, un 25% por los tejados, un 15% en el suelo como por las carpinterías y otro 10% por infiltraciones de aire.
