Justo cuando se han cumplido dos tercios de campeonato, el Real Zaragoza ha dado con la tecla y ha conseguido tres victorias consecutivas, siendo el mejor equipo de la segunda vuelta
El Real Zaragoza ha llegado justo a tiempo. Justo cuando llega la recta final de la Liga 1|2|3, el conjunto de Natxo González ha enlazado tres jornadas consecutivas en las que ha logrado la victoria. La paciencia, el trabajo y el paso del tiempo al final ha dado sus frutos. El equipo aragonés todavía no ha conseguido su objetivo, que es el de subir a Primera División, pero está más cerca de estar en una plaza de playoff que da derecho a promocionar. Hace apenas un mes este objetivo era impensable, ya que el equipo llegó a estar solo dos puntos por encima del descenso. Pero Natxo González no perdió la esperanza y sabía que el equipo acabaría más arriba que abajo.
El equipo ya se conoce, se ha vuelto un bloque compacto que apenas encaja goles, ya sea por solidez defensiva o por el estado de gracia en el que vive Cristian Álvarez. Además, el goleador del equipo, Borja Iglesias, se ha reencontrado con el gol tras una larga sequía. Estos aspectos sumados a la aparición de jugadores como el canterano Lasure, que se ha adueñado del lateral izquierdo con actuaciones más que correctas o como Oliver Buff, que tras estar un tiempo sin tener protagonismo ha vuelto a su mejor nivel han propiciado que el equipo esté en una dinámica positiva.
Todo pasa por vencer el sábado
Natxo González ya tiene de cierta manera su alineación fija, encontrando un equilibrio en el centro del campo con un rombo formado por Eguaras, Zapater, Guti y Febas, para que arriba se sitúe Borja Iglesias acompañado de Jorge Pombo, que ha encontrado su hueco en el once junto al delantero gallego en ataque. Esta buena racha le ha servido al equipo para que tenga opciones de entrar en zona de playoff, y todo pasa por ganar al Numancia este sábado en Soria; si vence, el Real Zaragoza se pondría a un punto del conjunto numantino, con toda la segunda vuelta por jugarse y con una afición volcada con el equipo. Si consiguiese el empate, no sería del todo un resultado malo, puesto que aun tendría posibilidades de alcanzar el playoff. Por su parte, en caso de derrota, el equipo sufriría un retroceso en su remontada respecto al playoff, pero viendo las sensaciones de los últimos partidos, no habría que dar por muertas las aspiraciones de playoff del equipo aragonés, que ve que ahora todo es posible y que sí se puede conseguir el objetivo.
