Derrota del Athletic frente a un Espanyol que mereció más en la que iba a ser una bonita despedida para el Kuko Ziganda y acabó siendo una unánime pitada.
Un día más en la oficina en San Mamés, mal juego del equipo, derrota, pitada para los jugadores y pitada para el Kuko Ziganda en lo que ha sido su último partido oficial al frente del conjunto vasco. El partido de los rojiblancos ha sido similar a los de las últimas fechas: pocas ocasiones, fragilidad defensiva y, sobretodo, un pobrísimo juego. Por su parte, gran partido del Espanyol en el que creó muchas ocasiones en las que puso en serios apuros a Kepa Arrizabalaga.
Los primeros minutos fueron de tanteo hasta que, en el minuto 9, David Lopez con un soberbio cabezazo a la salida de un corner mal defendido por los leones consiguió batir a Kepa Arrizabalaga. En los siguientes minutos después del gol, el Athletic intentó hacerse con el balón y lo consiguió pero sin crear prácticamente ocasiones. Tras el descanso la cosa siguió igual, dominio del Athletic y ocasiones del Espanyol y esta fue la tónica de toda la segunda parte.
Durante el partido y después del mismo se escucharon pitos del público bilbaino dirigidos a la plantilla y al entrenador que se despedía hoy tras una temporada para olvidar. Fue día de despedidas en San Mamés ya que también decía adiós el colegiado andaluz Fernández Borbalán que según desveló durante la semana en una entrevista, eligió la Catedral como sede para su último partido como árbitro profesional por el buen trato que, según el, ha recibido siempre allí.
