Un sólido Real Madrid recuperó el factor cancha en el tercer encuentro de la serie. La explosión anotadora de Carroll en el último cuarto, la defensa de Tavares y el gran partido de Doncic, las claves de la victoria madridista. Por parte de Baskonia, Poirier, Shengelia y Beaubois fueron más destacados. El siguiente partido, también en el Buesa, puede decidir la final.
Ambiente descomunal en el Buesa Arena para recibir al Real Madrid. 15.512 baskonistas batieron el récord de asistencia en un partido de playoff de la Liga Endesa. En medio de esta imponente atmósfera, ambos conjuntos nos ofrecieron un partidazo. El encuentro destacó por los contundentes parciales protagonizados por los dos finalistas de nuestra liga.
La clave estuvo esta vez en el último periodo donde los blancos respondieron con solidez a un parcial de 7-0 del Baskonia gracias al acierto de Carroll y la defensa de Tavares. A pesar de la victoria, no todo son buenas noticias para los madridistas. Llull volvió tener un pésimo rendimiento y Randolph ha desaparecido de la rotación. En cuanto a Baskonia, el equipo volvió a pelear pero la profundidad del conjunto de Pablo Laso resultó ser demasiado. Tras un buen inicio de último cuarto, los vitorianos se descompusieron y no fueron capaces de frenar el talento del Real Madrid.
Una primera mitad para el recuerdo
El equipo local comenzaba el encuentro respondiendo a las expectativas. Intensidad asfixiante en ambos lados de la cancha. Poirier dominaba los tableros y con seis puntos lideraba un parcial de 8-0 a favor de los baskonistas. El galo protagonizaría uno de los duelos más espectaculares del partido ante el gigante Tavares. El Real Madrid sufría mucho en el rebote al tiempo que Baskonia castigaba la defensa blanca.
Los triples de Beaubois, Vildoza y Shengelia disparaban a los vascos 17-8 arriba. A falta de poco más de dos minutos para la conclusión del cuarto, los blancos comenzaron a mostrar síntomas de mejoría. Un tremendo parcial de 2-10 coronado por un triple de Thompkins dejaba al conjunto merengue a un punto de los de Vitoria. Finalmente, con un triple de Janning y dos malas acciones de Doncic, los azulgranas cerraban el cuarto con cuatro puntos de ventaja.
En los primeros compases del segundo cuarto la inercia era similar. Los pupilos de Pedro Martínez dominaban el encuentro por medio del rebote. Fue en este momento cuando Doncic entró en escena en el partido. 7 puntos consecutivos del esloveno acercaban a su equipo a un punto de Kirolbet Baskonia. Vildoza respondería con dos canastas consecutivas. Los cambios de liderazgo en el marcador eran continuos. El último minuto del segundo periodo fue frenético. Taylor encestó de tres para poner por delante su equipo pero Beaubois le dio la réplica inmediatamente con un descomunal triple para cerrar la primera mitad. El Real Madrid perdía por dos al descanso.
Doncic hace acto de presencia en la final
Tras el paso por vestuarios, Baskonia protagonizó un nuevo arreón de la mano de un gran Beaubois (17 puntos). Los vascos colocaban la máxima del partido en el inicio del tercer cuarto (51-42). En este momento, Shengelia cometería su cuarta falta personal lo que le dejaría fuera del partido hasta el último cuarto. La infracción del georgiano sería el punto de inflexión del inicio de la remontada blanca. Conducidos por un inspiradísimo Doncic (20 puntos y 9 rebotes para 27 de valoración), los blancos consiguieron ponerse por delante en el marcador.
Las buenas acciones de Rudy Fernández y el cuarto triple de Thompkins forzaron el tiempo muerto de Pedro Martínez. Como ya ocurriese durante el final del segundo cuarto, un triple de los vitorianos en la última posesión del tercer periodo, esta vez de Voigtmann, cortaría la mala racha del equipo y les dejaría a tan solo dos puntos del Real Madrid.
Tavares «tapona» a Baskonia
El inicio del último periodo fue un aluvión baskonista. Shengelia volvía a pista y la intensidad del equipo local cortocircuitó por completo el ataque blanco. Aprovechando esta tesitura, Baskonia endosó un 7-0 de salida para colocarse 70-65 arriba en el marcador. Llull se mantenía en pista a pesar de su pésimo partido (0/10 en tiros de campo).
Tras el tiempo muerto de Pablo Laso, el equipo reaccionó de forma brutal. Nuevamente, apareció Jaycee Carroll, hasta ahora el mejor jugador del conjunto merengue en la final. El americano anotó 10 puntos en el último periodo que, junto al trabajo “sucio” de Rudy Fernández, colocaron de nuevo al Real Madrid arriba en el electrónico a falta de tres minutos para la conclusión del encuentro (76-79).
Durante los siguientes ataques, Baskonia no logró anotar pese a las imprecisiones de los blancos en ataque. Mención especial merece en este momento la defensa de Walter Tavares. El caboverdiano estuvo soberbio con cinco tapones. Uno de ellos, sobre Toko Shengelia, fue decisivo para que su equipo lograse la victoria. Tras el tapón recibido, Shengelia cometería su quinta personal sobre Doncic. Acto seguido, éste encestaría los dos tiros libres para certificar el triunfo merengue.
